La meteorología es un factor que está detrás de muchos de los rescates que suceden en el Aneto. Conocer la previsión meteorológica es fundamental en montaña, ya que nos dará una idea de cómo y cuándo es más aconsejable afrontar la ascensión, qué temperaturas vamos a tener que soportar, con qué cantidad de ropa de abrigo debemos salir, etc.
Nuestra mochila siempre debe llevar el material necesario para protegernos de estas posibles condiciones: abrigo para todo el cuerpo, cortavientos/impermeable y protección solar.
¿Dónde consulto la previsión meteorológica?
En la página de la AEMET existe una previsión específica de la meteorología para áreas de montaña que debemos consultar siempre. Esta previsión detallada nos facilita datos muy interesantes para el montañero como la velocidad del viento en altura, la altura de la isoterma cero, la probabilidad de tormenta, la sensación térmica o la intensidad de la radiación UV.
¿Qué meteoros me pueden afectar?
En alta montaña la amplitud térmica entre el día y la noche es muy acusada. Incluso en verano es muy probable tener temperaturas cercanas a los cero grados.
Las tormentas, acompañadas por aparato eléctrico, pueden ser habituales en la zona del Aneto a partir del mediodía, deberemos prestar atención a la previsión meteorológica y a la evolución de la nubosidad a lo largo del día. Las zonas de crestas y cumbres son muy peligrosas en esas condiciones por probables caída de rayos.
Con nubes bajas o nieblas puede ser difícil orientarse y seguir los hitos o mojones, ya que en la alta montaña no hay sendas claras. Además, en esas condiciones, el suelo y las piedras suelen estar mojadas, por lo que son frecuentes los resbalones.
¿Debo preocuparme del sol y del viento?
Por supuesto que sí: la radiación solar es más intensa en zonas de alta montaña. La nieve y el hielo reflejan aún más la radiación, y recuerda que vamos a transitar obligatoriamente por hielo y nieve. Protege la piel con crema solar de alto Factor de Protección Solar y usa gafas de sol para evitar problemas oculares.
Un viento fuerte produce una sensación térmica muy por debajo de lo que marca el termómetro, enfriándonos de forma considerable. Lleva siempre en tu mochila un cortavientos, gorro y guantes finos.
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